La cena que nos salvó

Desde que llegamos, el personal nos hizo sentir especiales. Paula organizó una cena deliciosa y abundante, que fue un gran detalle después de un largo viaje. El desayuno fue genial, con productos frescos y sabrosos.

Sin embargo, el aparcamiento puede ser un inconveniente, ya que hay que dejar el coche en medio de la plaza del pueblo. La almohada era un poco dura para mi gusto.

Las habitaciones eran amplias y muy limpias, con una decoración acogedora que me hizo sentir como en casa. Disfruté del desayuno con zumo recién exprimido y el trato amable del personal que siempre estuvo disponible para ayudarme.

Podrían mejorar la señalización para llegar al hotel.

Desayuno de campeones y buena cena.

El hotel es ideal para la familia. Disfrutamos del servicio 'bikefriendly' y el trato encantador de Tony y Chechu hizo que nos sintiéramos como en casa. Nos encantó que los niños pudieran jugar en el entorno natural mientras nosotros degustábamos la deliciosa comida local.

A mis hijos les hubiera gustado tener más opciones de desayuno.

El restaurante ofrece platos asturianos de calidad inmejorable, cada bocado es una explosión de sabores.

El desayuno no es buffet y podría haber más variedad en los alimentos disponibles.

Habitación grande, acceso moderno con tarjeta, entorno natural impresionante

No hay espacio de aparcamiento específico, dificultando la llegada con coche!!! La falta de señalización clara complica el acceso al edificio!!! El desayuno no es buffet y debería mejorar!!! No todo estaba disponible en la cocina!!!

* Atención excepcional
* Comida deliciosa

* Acceso complicado

Wi-Fi gratis en áreas públicas y el jacuzzi es genial. Aparcamiento un poco complicado.

Fue una opción adecuada para una estancia fugaz en Tuña con una buenísima relación calidad precio. Me encantó el trato familiar de Tony y Chechu, siempre dispuestos a ayudar y hacernos sentir cómodos. Si te gusta el ciclismo, aprovecha el servicio 'bikefriendly' que ofrecen.

La habitación que nos tocaron era bastante grande, muy limpia y moderna. Lo mejor fue lo cómoda que estaba la cama. Podías dormir súper bien. Además, todo funcionaba bien, teníamos caja fuerte y baño completo. Sin quejas, la verdad.

una experiencia inolvidable en casa pipo gracias a la amabilidad del personal y un delicioso desayuno con zumo recién exprimido

El hotel Restaurante Casa Pipo es un lugar encantador, ideal para disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza. La atención del personal fue excepcional, haciéndonos sentir como en casa. Además, el restaurante ofrece platos asturianos que son una delicia. Destaco que pudimos disfrutar de un desayuno con zumo recién exprimido, lo que lo hizo aún más especial.

buena experiencia pero con detalles a mejorar

La atención del personal fue excepcional. Paula se aseguró de que tuviéramos cena a pesar de llegar tarde. Las habitaciones eran amplias y modernas, con todas las comodidades necesarias.

El acceso al hotel podría ser un poco complicado debido a la falta de señalización clara.

El restaurante Casa Pipo en Tuña es sencillamente excepcional. Los platos asturianos son de calidad inmejorable, cada bocado es una explosión de sabores. La tranquilidad del lugar te invita a disfrutar de una experiencia culinaria única, aunque el colchón podría ser un poco más cómodo. Sin duda, pensaré en regresar.